Una de las principales consideraciones que afectan a los fabricantes de hoy en día es cómo llevar sus productos al mercado de manera eficiente. El proceso físico de trasladar mercancías de un lugar a otro es extremadamente complejo y puede tener un impacto enorme en los márgenes de beneficio de las empresas manufactureras. El movimiento moderno de mercancías a través de barreras nacionales e internacionales puede tener lugar por tierra, mar o aire. Cada una de estas vías de viaje tiene ventajas y desventajas, incluido el costo, los tiempos de envío, la disponibilidad de los servicios y posibles demoras. En este artículo, analizaremos más de cerca el transporte marítimo, incluida la descripción de por qué es el método más utilizado para transportar mercancías a nivel mundial, y dónde los fabricantes y distribuidores tienen problemas para depender del transporte marítimo.

El transporte marítimo global representa la mayoría de los bienes que se mueven a través de las fronteras internacionales. De los tres métodos de transporte, el transporte aéreo representa menos del uno por ciento de las importaciones totales a los Estados Unidos. Esto significa que la gran mayoría de los productos que ingresan a los Estados Unidos de fabricantes extranjeros viajan por barco. Aunque el transporte aéreo es fácilmente el más conveniente debido a la velocidad con la que se pueden mover las mercancías entre ubicaciones, también es una forma de transporte con un costo prohibitivo en el que pueden confiar los fabricantes. El uso exclusivo del transporte aéreo aumentaría significativamente el costo de fabricación y entrega de bienes al mercado.

Para los fabricantes, hay una serie de factores diferentes que deben tener en cuenta al decidir cómo van a transportar sus productos al mercado. El primer factor es el costo. Equilibrar estos factores es fundamental para garantizar la rentabilidad a largo plazo. El primer factor que los fabricantes deben sopesar es el costo de las diferentes modalidades de transporte. El transporte aéreo tiene un costo excesivamente prohibitivo para la mayoría de las mercancías que viajan al extranjero. El transporte terrestre, incluso por camión o ferrocarril, es asequible e ideal para trasladar mercancías a un puerto o entre países sin salida al mar. El transporte marítimo es necesario para mover productos a granel a los mercados extranjeros, pero los costos del transporte marítimo pueden variar ampliamente según las condiciones del mercado. Se estima que los costos del transporte aéreo actualmente cuestan entre 12 y 16 veces más que transportar los mismos productos por mar, lo que hace que el transporte marítimo sea la opción obvia para la mayoría de las empresas manufactureras en el extranjero.

Un segundo factor que los fabricantes deben tener en cuenta es el tiempo que tardan sus productos en llegar a los mercados extranjeros utilizando diferentes modalidades de transporte. El transporte aéreo es el más rápido, con tiempos de entrega una fracción de otros métodos de transporte. El transporte marítimo puede ser lento, con tiempos de tránsito que van de dos semanas a un mes. Debido a la gran cantidad de productos que ingresan a los puertos a través del transporte marítimo, existe un tiempo adicional significativo para que los productos pasen por la aduana y lleguen a los centros de distribución terrestres desde los puertos.

El tiempo de retraso cuando se utiliza el transporte marítimo es una consideración importante para los fabricantes y distribuidores. Con retrasos de uno a dos meses en la entrega de productos a los distribuidores, tanto los fabricantes como los distribuidores deben anticipar con precisión la demanda para mantener un suministro constante. Si la demanda es demasiado grande, habrá una escasez de productos que puede existir durante uno o dos meses, lo que provocará una pérdida de beneficios. Si hay problemas con una determinada iteración de productos, los fabricantes deben realizar cambios en el diseño del producto de manera rápida y eficiente, para no generar demoras en la cadena de suministro de sus distribuidores.

Las diferentes modalidades de envío de mercancías tienen costos, ventajas y desventajas únicos que los fabricantes deben tener en cuenta. Los fabricantes extranjeros confían cada vez más en el uso del transporte marítimo actual para mover mercancías entre naciones, lo que crea una mayor demanda de transporte de la que la infraestructura de transporte marítimo existente puede satisfacer adecuadamente. Como tal, durante los períodos de alta demanda, los fabricantes pueden enfrentar fuertes aumentos en los costos para mover sus productos a los mercados extranjeros, lo que reduce aún más su rentabilidad. Debido a esto, los fabricantes también deben sopesar las ventajas de fabricar en el extranjero frente a fabricar productos en el país en sus mercados más grandes. En algunos casos, la creación de centros de fabricación nacionales da como resultado un costo beneficio positivo a pesar de los costos laborales más altos en comparación con la fabricación en el extranjero. Equilibrar estas consideraciones seguirá siendo crítico para las empresas manufactureras internacionales, particularmente porque el precio y la disponibilidad del transporte marítimo continúan experimentando volatilidad debido a que la demanda supera la oferta de buques portacontenedores listos.